Día Internacional de la Mujer Trabajadora.

Ni amas ni esclavas.

Cada 8 de marzo salimos a las calles, colectividades de mujeres, niños y niñas, feministas, tranfeministas, no binarias, diversidades sexuales, trabajadoras, estudiantes, mujeres, salimos a revindicar las justas luchas dadas históricamente por las mujeres en busca de nuestra libertad, de la igualdad de derechos, de igualdad de deberes por parte de los hombres, salimos como forma de rechazo ante una sociedad que sigue mercantilizando fechas conmemorativas, visibilizando que nos siguen matando, que nos mutilan, que nos violentan, por nuestra condición de mujer, por la feminidad o falta de ella.

Salimos a las calles visibilizando que somos doblemente explotadas, en nuestros trabajos y en nuestras casas, que el trabajo de cuidadoras sigue depositándose en las mujeres, que la brecha laboral existes y seguimos ganando 30% menos que los hombres, que el desempleo afecta en mayor proporción a las mujeres. Que bajo el modelo social y económico actual seguiremos siendo esclavas.

Como mujeres nos atraviesa no solo las jerarquías clasistas, sino también las raciales coloniales, que nos violentan, precariza, invisibilizan. Los retos son muy grandes, y cada paso en la historio nos ha demostrado que podemos superarlos, que de apoco, las diferencias e exclusión impuesta socialmente disminuye. El camino es largo, pero los feminismos fuertes.

El 8M es una fecha e unión y de reivindicación, seguiremos visibilizando, denunciando, acompañando, luchando y haciendo frente a este Estado patriarcal apelando a la emancipación de la mujer, a una sociedad sin jerarquías, a la libertad de los seres. Seguiremos en pie de lucha frente a la doble explotación, frente al falta de garantías laboras y sociales, frente a la objetivación de nuestros cuerpos, a la pertenencia de lo que somos.

Finalmente, rechazamos y condenamos las acciones de provocación y apropiación que pretendió hacer Albaro Hernán Prada al querer mostrar una falsa solidaridad con el acto que se realizaba frente la alcaldía de Neiva el #8M. Como mujeres, como feministas, como colectividades, como diversidades sexuales condenamos a quienes históricamente han negado los derechos de las mujeres, comunidad diversa. Y más a un partido como el centro democrático que ha condenado al país y las mujeres a una política de muerte, invisibilizado la importancia de las mujeres en la construcción de un mejor y nuevo país. El rechazo es para toda forma de autoridad. Nos queremos vivas y libres.

Donde hay conciencia de las desigualdades entre mujeres y hombres e intención de superarla, hay feminismo.